El impacto tecnológico en la sociedad, concretamente con el acceso a Internet y a las redes sociales, es un fenómeno que está en pleno apogeo, que lo mismo alcanza a los adultos, que a los niños, siendo éstos últimos quienes tienen mayores riesgos.
Esa misma velocidad a la que se viven estos cambios, aunados a la falta de información y supervisión por parte de los padres en relación a lo que hacen los menores de edad en las redes sociales, así como la falta de filtros más eficaces para asegurar que los más jóvenes cumplan con las normas que garanticen su seguridad, los pone en riesgo.
Notimex compartió una infografía a través de su portal del 11 de mayo, cuando informó que existen 7.5 millones de menores de 13 años en la red social Facebook; sin embargo dicha red manifiesta que retira cerca de 20 mil perfiles de menores por día. Esto nos da idea del por qué los padres deben unirse al esfuerzo de protección de los menores.
Un estudio de la revista Comsumer´s report, que desde 1936 publica críticas y comparación de productos y servicios, muestra a través de una encuesta realizada, que más de cinco de los siete millones y medio de menores en Facebook, no rebasan los 10 años, así como el que un millón de niños han sido molestados, amenazados o expuestos a otra forma de agresión.
Por otro lado el estudio realizado por la Academia de Pediatría de los Estados Unidos nos menciona que Facebook podría originar depresión, puesto que en la red, se da el ciber acoso, el ciberbullyng, situación que pueden generar alteraciones en los jóvenes obsesionados con su uso, así como el acceso a contenidos sexuales no aptos para menores.
Aunado a ello, los menores incrementan el riesgo, al subir contenido fotográfico explícito; ejemplo de ello, es el resultado de la encuesta realizada por la Campaña Nacional para Prevenir el Embarzo en adolescentes y la revista Cosmo Girl, misma que reflejó que del 22% de adolescentes femeninas así como el y 18 por ciento de adolescentes masculinos, admitieron haber publicado o enviado fotos o videos de ellos mismos con poco o nada de ropa, y el 39 por ciento reconoce haber enviado o publicado mensajes explícitos.
Por si esto fuera poco, otra situación importante por la cual los padres deben aprender a utilizar las redes sociales, y supervisar el manejo de ellas por sus hijos, es el riesgo de exponer en ella el patrimonio familiar o que sus hijos puedan dañar a otros sin que ellos lo sepan, (cyberbulling, amenazar, agredir, intimidar o difamar a una persona) siendo partícipes de este al omitir la supervisión y guía de sus menores en la red.
Ejemplo de ello es el caso que se presentó en Argentina, donde una compañera de una pequeña de 10 años, creó un grupo para agredirla, hasta que el hecho fue denunciado al Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI ) mismo que junto a otros casos cuestiona la responsabilidad que tienen los padres de los menores involucrados. Otros casos relevantes son el de Holly Grogan o Natasha MacBryde ambas de 15 años.
Con el gran crecimiento que ha tenido Facebook en México, en donde existen más de 25 millones de cuentas creadas, herramientas tales como como ¿Cómo puedo acceder a la cuenta de mi hijo o eliminarla si tiene 13 años o más? así como «reporta a un niño menor de edad» son de gran utilidad, porque van dirigidas a los padres, pero como comunidad, los usuarios también pueden reportar a los niños que detecten que están en la red para protegerlos de posibles amenazas.
¿Usted vigila lo que hacen sus hijos menores de edad en la red?
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Fuente: Notimex, varias.
